El Zohar (Resplandor) es un libro místico judío esotérico. No forma parte del canon del Israel nazareno. No le animamos a leer este libro, y tenemos muchas reservas al respecto. Sin embargo, es uno de los muchos libros extracanónicos (Apócrifos, Jasher, Enoc, etc.) que existen, y no podemos prohibir a los estudiosos que los lean. El Zohar es más popular en la Casa de Judá que entre los efraimitas. Un rabino judío mesiánico creyente en Yeshua me envió las siguientes citas del Zohar. Para él son testigos de Yeshua. (Por favor, permítanme aclarar que no estoy respaldando el Zohar, sólo estoy compartiendo estas citas aquí para transmitir cómo un compañero judío ve a Yeshua en el Zohar).
El lenguaje en el Zohar se lee de forma muy diferente a las Escrituras, pero fíjate en las claras referencias a un padre, una madre y un hijo. Podemos observar que la palabra para espíritu en hebreo (Ruach) es técnicamente neutra, pero en arameo (Rukha) es técnicamente femenina. Pero incluso en hebreo el espíritu se entiende como un atributo femenino del Eterno. (Y padre-madre-hijo tiene más sentido que padre-neutro-hijo).
“Dos rabinos en un viaje místico al Gan Eden oyen una voz que les dice: “Son dos; uno está unido a ellos, y son tres. Cuando se convierten en tres, son uno”. Los rabinos están confundidos, pero el guardia del jardín explica el significado: “Estos son los dos nombres del Shema: YHWH, YHWH, YHWH’ ‘Nuestro Elohim’ los une … Cuando se unen, son uno en la unidad”. (Zohar III (sobre B’Midbar), 162a, V:232, edición Soncino).
Observe en la segunda cita cómo los dos discípulos de YAHWEH (YAHWEH-Yeshua) son uno cuando se unen. (Esto tiene sentido, ya que cada familia puede tener más de un miembro de la familia, pero aún así estar unidos como una familia ejad).
“La palabra “OMeR(אמר) (discurso) denota las letras y los caminos que proceden del Padre, de la Madre (Espíritu) y de la Cabeza que procede de ellos, que es el Hijo primogénito. ALEF(א) simboliza al padre… el MEM (מ) se une a él y produce EM(אם) que significa la madre. El RESH(ר) es la cabeza que simboliza al hijo. Cuando estos 3 se unen, el resultado es que forman la “palabra”, el “discurso”. Así, el padre, la madre y el hijo primogénito se irradian mutuamente en una unidad”. (Zohar II (sobre Shemot), 136b, Volumen III página 391, edición Soncino).
Creemos que el Verbo al que se refieren es el Hijo primogénito de todos los que han sido redimidos de la muerte.
Jochanan (Juan) 1:1-5
1 En el principio era la Palabra, y la Palabra estaba con Elohim, y la Palabra era Elohim.
2 En el principio estaba con Elohim.
3 Todo fue hecho por medio de él, y sin él no se hizo nada de lo que se hizo.
4 En Él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.
5 Y la luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no la comprendieron.
Y de nuevo en el versículo 14:
Jochanan (Juan) 1:14
14 Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros, y vimos su gloria, la gloria como del unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.
